Cuando Samsung presentó el Galaxy S24 Ultra, lo hizo con grandes promesas: un nuevo cristal ultraresistente llamado Corning Gorilla Armor Glass, capaz de reducir reflejos y evitar arañazos, sin comprometer la experiencia visual. En sus primeros días, el dispositivo fue aplaudido por la crítica especializada. Pero ahora, con el uso diario, empiezan a aparecer señales de desgaste que preocupan a más de un usuario.
¿Un recubrimiento antirreflejo… demasiado delicado?
Algunos propietarios del S24 Ultra han empezado a notar un problema común: el revestimiento de la pantalla se está deteriorando, especialmente en los bordes o en zonas de uso frecuente, como la parte central del panel. En redes sociales, circulan imágenes que muestran marcas visibles y rayaduras, incluso tras limpiezas suaves con paños de microfibra.
Varios de los afectados coinciden en que el desgaste se concentra en los puntos más usados, como los recorridos del dedo al deslizar por el feed de una red social. Y eso llama la atención, sobre todo porque hablamos de un teléfono que roza los 1.400 euros. La sospecha gira en torno a que la capa antirreflejo sería más blanda que el vidrio que la sostiene, lo que la vuelve más susceptible a rayones superficiales.
¿Qué dice Samsung?
Por ahora, Samsung no ha emitido un comunicado oficial sobre este incidente. Los usuarios, mientras tanto, se preguntan si esta posible falla entrará dentro de la garantía del fabricante, o si será considerada un daño por uso normal. Algunos han optado por añadir protectores de pantalla, aunque esta solución presenta un inconveniente: muchos de estos films son más brillantes y reflectantes que el cristal original, lo que afecta la visibilidad en exteriores.
Cómo minimizar el desgaste del revestimiento
En espera de una respuesta por parte de la marca, los expertos recomiendan evitar el uso de productos químicos o limpiadores agresivos. Lo mejor es usar siempre un paño de microfibra seco y suave. Aunque esto no impedirá el desgaste total, sí puede retrasar el deterioro y proteger la pantalla en el día a día.
Para quienes desean seguir utilizando el teléfono sin correr riesgos mayores, el protector de pantalla sigue siendo una opción viable, aunque sacrifica algo de la calidad visual que hacía destacar al S24 Ultra.
Un dilema para los dueños del modelo
La situación plantea un dilema curioso: ¿es mejor conservar la apariencia premium del móvil con una pantalla libre de films, aun sabiendo que se puede rayar, o protegerlo con un accesorio que degrada la experiencia visual? Para muchos, el Galaxy S24 Ultra representaba la cima de la ingeniería móvil, pero esta queja ha sembrado dudas.
La comunidad tecnológica espera ahora que Samsung tome cartas en el asunto, ya sea ofreciendo sustituciones gratuitas, garantías ampliadas, o asegurando que en próximas versiones se mejore el acabado de su aclamado revestimiento antirreflejo.
Tecnología brillante, pero no perfecta
Lo que esta situación demuestra es que, incluso en dispositivos que lideran el mercado, la perfección tecnológica sigue teniendo margen de mejora. La innovación trae avances, pero también desafíos. Y para quienes han invertido en uno de los teléfonos más avanzados del mercado, el deseo de una respuesta por parte de la marca es más que razonable. Estaremos atentos a los próximos movimientos de Samsung.












